Iron Maiden
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Tratar de revivir uno de los conciertos más importantes en la historia del heavy metal no es tarea fácil, y más si se trata del gigantesco tour que la doncella realizo ya hace más de 2 décadas, Live After Death.
Pantallas gigantes con imágenes que muestran al grupo muy unido con el público, dan pie al famoso discurso de Winston Churchill, la locura colectiva llego cuando la agrupación liderada por Harris sale al escenario con Aces High, miles de gargantas al máximo ya que ante nosotros la historia de Maiden cobraba vida con una de las canciones mas importantes de su trayectoria, sin dar respiro 2 Minutes to Midnight y The Trooper llenaron las expectativas de todos los presentes en cuanto a su set list; a estas alturas todos esperábamos que "el ingeniero de sonido" realizar un buen trabajo arreglando el sonido desde sus controles, labor que durante todo el show no logro con éxito, fue algo muy triste y que no vale la pena resaltar mucho, pero estamos hablando de Iron Maiden y es una pena enorme que no se tomen su tiempo para un detalle tan importante como este.
De regreso al concierto Revelations tema que si no estoy mal llevaban un buen tiempo sin interpretar y Wasted years, nos permite cerrar los ojos y mirar hacia atrás, recordar los años dorados en los que la doncella nos tenía hipnotizados en la época del colegio cuando todos teníamos por lo menos un afiche, un cuadro, un vinil en mi caso, o algo referente a ellos, es aquí donde nuestro amigo Tato se nos viene a la cabeza, uno de los fans más grandes que Maiden puede tener.
Para The Number of the Beast Bruce sale con un sombrero de charro perdiendo todo el sentido de la canción, y es que no nos imaginamos a Eddie peleando mano a mano con el diablo portando un sombrero mexicano; los demás integrantes con calificación de 10 sobre las tablas, Dickinson mueve al público a su antojo, es un frontman con la capacidad de hacer que el 100% de los asistentes hagan lo que el desee, Harris corre por todo el escenario mientras los telones de fondo cambian entre canción y canción, Janick Gers, Adrian Smith y Dave Murray hacen del sonido de la guitarra algo especial, y ni hablar de Nicko tras su batería, 6 bestias del heavy metal.
Can i Play with Madness, Run to the Hills hacen que todos saltemos de alegría, Rime of the Ancient Mariner deja ver a unos Maiden llenos de virtuosismo y genialidad; sin perder respiro llega Powerslave, que gran tema, pero donde esta la esfinge que sale en su web arrojando fuego por sus ojos??? Pieza clave que falto en la gira americana y que todos echamos de menos; Heaven can Wait retomo la tradición de subir al escenario a un grupo de fans acérrimos que siempre soñaron con cantar al lado de Harris y compañía algo tan sencillo pero tan importante como fue Whoaaa hoooo oohhhh ahoooonohhhhhhhhh !!, segundos que durarán por siempre.
Fear of trhe Dark se puede llamar como el as bajo la manga ya que cuando realizaron dicha gira este álbum no había salido al mercado, aunque las canciones del Seventh Son of a Seventh Son y Somewhere In Time salieron después se pueden tomar como clásicos de su primera etapa, se que muchos fans como yo esperábamos ese tema con ansias; Iron Maiden es uno de los más esperados por todos y es que los que hemos seguido a la bestia durante tantos año sabemos que aquí llega algo especial, su mascota conocida por todos como Eddie sale disparándonos a todos como si llegara de otro tiempo, algo que ya vivimos pero en un tiempo futuro (Somewhere in Time mi álbum favorito), al rededor de 3 metros de alto Eddie camina entro toda la doncella, en especial Gers (que parece su hermano menor) que es el que más interactúa con el.
Moonchild y The Clairvoyant dan comienzo del fin de este gran concierto, a estas alturas el encargado de sonido parece haberse equivocado de profesión; que buena selección de canciones, que buen escenario y que energía e estos señores, en especial de Bruce que se pone en el papel de cada canción y sale con una vestimenta adecuada, para darle un toque más profesional y emocional, corre por detrás del escenario agitando la bandera inglesa y gritando una frase con el sello Dickinson: Scream for me... México, aunque nos hubiese gustado más escuchar Scream for me COLOMBIA!.
Para cerrar como los grandes Hallowed be thy Name como siempre lo habíamos soñado, manos en alto y gargantas a tope, así termino este gran concierto que de no ser por el sonido la historia sería diferente, nos deja un sabor extraño que solo se curará con el retorno de la bestia a tierras aztecas.
De nuevo en el hotel la historia se repite, solo que en esta ocasión y como podrán ver en las fotos el señor Steve Harris me tomo la foto con Janick debido a que estaba totalmente solo con ellos en el lobby, no entiendo por que los demás fans los esperaban en el aeropuerto cuando se sabe que viajan solos en aviones aparte???, solo Bruce llego en su avión con el resto del staff, para suerte mía que logre estar solo con ellos un buen rato.
Somewhere Back in Tour.
Adriana y Andrés, México, Febrero / 2008.
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